Esta
noche me llamarás, como cada noche. Me dirás que mire las estrellas desde mi
balcón, porque estarán preciosas. Entonces te veré en la calle, en la acera,
debajo de mi balcón, con el teléfono en la mano, diciéndome lo preciosa que
está una estrella en un balcón. Bajaré corriendo por las escaleras, abriré la
puerta y m tiraré a tus brazos. Nos besaremos, un beso lleno de pasión, de
amor, de estimación, de no me dejes nunca. Cuando acabemos el beso me mirarás a
los ojos y me susurrarás al oído un “te quiero”. Yo te sonreiré y te diré que
yo más. Entonces me subirás a caballito e iremos a la playa, como dos enamorados
más, pero nos sentiremos especiales. Allí, demostraremos lo mucho que nos
queremos a la luna, el cielo, la playa y, lo que importa más, a nosotros dos.
Nos despertaremos,
pasaras tu brazo alrededor de mi hombro y veremos el mejor amanecer de nuestras
vidas.
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