Oigo voces en la azotea de mi cabeza.
de antemano te digo que imposible te será.
Aúllo a las lunas ajenas a nosotros,
confundiéndolas con planetas de otros.
Rechazo la mano de aquel que un día me prometió
‘que si alguno tiene que caer, caeré yo’.
Reabro heridas con la misma boca
que un día las mordió todas.
Encuentro tranquilidad
en todos los antónimos de 'paz'.
Escribo en mayúsculas todas esas palabras
que un día se atascaron en vuestras gargantas.
Odiadme, os lo ruego,
ya no soporto tantos besos.
¡Hola! Encontré tu blog por otro y la verdad es que me encanta, de hecho ya te sigo.
ResponderEliminarPor otra parte me gustaría que visitaras mi blog y opines.
Un besito.
http://enmil-pedazos.blogspot.com.es/
¡Muchas gracias por comentar y seguir! En cuanto tenga un rato me paso. ¡Besos!
EliminarSi te digo cómo he acabado aquí, ¡alucinas! Pero me alegro un montón. He estado leyendo tus entradas antiguas y tienes un arte que se escapa de la normalidad.
ResponderEliminarEn el fondo de ese "ódiame" hay un gran fondo, ¿verdad? Un montón de besos atascados.
Un besito.
Oh, no, las entradas antiguas de este blog deberían desaparecer... (pero me da penita borrarlas, jo). ¡Muchas gracias!
EliminarEse 'ódiame' puede esconder todo lo que no ha cabido debajo de la alfombra.
¡Besos!