sábado, 9 de noviembre de 2013

Quizá y solo quizá...

Quizá y solo quizá algún día todo esto acabe.
Pero yo no le veo salida a este pozo. Todo es oscuro. Y le tengo miedo a la oscuridad. Por muy infantil que parezca. . Aunque parece que mis ojos se han adaptado a la oscuridad que me rodea. Empiezo a distinguir cosas en este agujero sin salida, solo con entrada. Ya no soy la chica inocente que se cayó en el pozo sin buscarlo. La chica que no distinguía nada aquí dentro. Cuando caí todo era confuso. Demasiado. Solo oía voces. Voces en la oscuridad. Era aterrador. Tenía miedo. Mucho. Ahora supongo que ya me he acostumbrado a esto. Oscuridad. Voces. Gritos. Golpes. De todos lados. No sabía de dónde venía todo eso. Y así siempre. Aún sigo buscando un ladrillo mal colocado que me ayude a impulsarme para salir. Pero sigo sin encontrarlo. A lo mejor pueda acostumbrarme del todo a esto y quedarme aquí para siempre. Pero creo que no podría soportarlo. Antes me daría cabezazos contra las paredes  de este agujero hasta quedarme sin conocimiento.

Quizá y solo quizá nunca esto acabe.

1 comentario:

  1. Me ha gustado mucho, es una metáfora preciosa y cierta para los que somos.... En fin, así.
    Besos

    ResponderEliminar